A Lindsay Alfonzo los trofeos de campeones no le son extraños, su progenitor el Dr. Eduardo Alfonzo fue campeón nacional categoría “Máster” durante el 2008 y defendió con éxito su diadema en el 2009 para retener su título, fue presidente de la Federación Venezolana de Coleo pero no pudo seguir en la presidencia por el hecho de ser atleta, adicionalmente este atleta colecciona un gran número de subcampeonatos, los tíos de la aragüeña Marcos y Frank Alfonzo fueron sólidos tricampeones de la categoría “A” durante los años 1965, 1967 y 1968, el primero de los nombrados, mientras que el segundo lo haría durante 1977, 1980 y 1982, mientras que ella logró su primer premio en el renglón Saque de puerta con 7 en 2001 teniendo como centro de competencia a la ciudad de Valencia, ahora su próximo reto será representar a la asociación de coleo del estado Lara junto a Ana Delfino, Saravanesa Sánchez y compañía en la convocatoria de Cabudare.
Después de la medalla de plata Por Equipo obtenida en los pasados XVIII Juegos Deportivos Nacionales 2011, la maracayera ha ido trabajando con mayor ahínco y es una de las coleadoras de Venezuela con tres camisetas distintas, Aragua, Cojedes y Lara que ha figurado por lo menos del décimo lugar hasta el cuarto en sus competencias, incluso hasta un segundo lugar tiene en su marca personal.
Gracias al apoyo de la Asociación de coleo de Lara desde el año pasado, la oriunda de la capital de los valles de Aragua cerró la campaña anterior con modestas presentaciones. Durante el 2011 contó con el respaldo de los larenses para que como un sentido tributo a la confianza brindada dejara el corazón en la manga “Veteranos de Aragua” y subiera al podio con sus compañeras de Equipo.
Además, Lindsay Alfonzo tiene un gran mérito incuestionable después de mantenerse fuera de las mangas del país desde el 2003 al 2005, regresando de su retiro en las instalaciones de la manga “José Tomás Heredia” de Barinas en el 2006 logrando 8 coleadas efectivas, 6 nulas y un saque de puerta con la camiseta de Aragua. Para el 2007 pone su grano de arena para clasificar en el sexto lugar la selección de Aragua, sexto en la tabla individual y subcampeona en la Copa Feveco como su mejor logro particular hasta el presente. Luego de defender por mucho tiempo los colores de Aragua cambia su ruta hacia Cojedes, ayuda a un tercer lugar a su nuevo equipo y termina en un meritorio sexto puesto individual una vez más. Su efectividad coleadora se mantiene cuando se ubica en la tabla clasificatoria en el tercer puesto y sexto en el 2010, terminando el 2011 con la mencionada medalla de plata en los XVIII Juegos Deportivos Nacionales.
Mucha gente se pregunta qué hubiera sido de Lindsay Alfonzo si no hubiera perdido un trienio de competencias, aproximada
mente tres Cheo Hernández Prisco, Copa Feveco y el Femenino Mayor, nueve confrontaciones mínimas. Luego de tal paro forzado, los días sin practicar, la inactividad pasa su factura, pero esto no fue impedimento para que ella tomara las cosas con otra visión y pudiera vencer ese muro cambiando en pocos años hasta tres camisetas y manteniendo su condición de reportera del coleo, por eso, su vuelta fue toda una sorpresa y tomar el camino de las competencias un reto digno de destacar.
Los próximo compromisos forman parte de un nuevo compromiso por ser escogida entre las representantes de Lara para competir por los mejores cinco plazas en la tabla de clasificación general. A la maracayera que cumplirá 30 años de edad el venidero mes de septiembre le bastará salir bien colocada en el sorteo para integrar el grupo de cuatro allá donde contarán con el respaldo del público.
La proveniente de Aragua, quien pertenece a una dinastía de campeones, no ha podido ceñirse una corona hasta el momento en las competencias en donde ha participado, muchos piensan que ya le ha llegado su oportunidad de emular a los campeones que han existido en la familia Alfonzo. Su gran deseo es precisamente ser campeona nacional y “después seguir como siempre, disfrutar de este deporte que me ha visto crecer y colear mientras se pueda”.
